Israel entre el Líbano y Siria en plena guerra

Por: Gastón Saidman

El frente libanés

La guerra actual entre Israel y Hamás despertó la amenaza de que dicho conflicto bélico se desarrolle en otros frentes, como lo es en el norte israelí y su frontera con Líbano. Pero no es tan así. Cada vez que Israel entra en conflicto armado con sus enemigos, Hezbollah interviene con amenazas y lanzamiento de misiles, sabiendo que Israel no va a tomar una decisión de llevar a cabo una guerra general con dicha organización terrorista, quien tampoco recibe el apoyo total del gobierno libanés para entrar en una guerra que sin duda será devastadora para su país que vive actualmente una de las peores crisis económicas. Hezbollah no lo puede pasar por alto teniendo en cuenta su status político interno donde en las últimas elecciones perdió muchos escaños y ya no tiene la fuerte representación que tenía, solo puede amenazar y seguir disparando cada cierto tiempo sin que Israel sienta una amenaza real y pueda concentrarse en su lucha en Gaza.  Debemos destacar que incluso bajo todas esas amenazas y fuertes palabras del secretario de la Organización, Hasan Nasrallah, Israel mostró con el asesinato del alto funcionario de Hamás, Saleh al-Aaruri, en el corazón de Beirut, que, si bien no comenzará una campaña general contra el Líbano, su mano puede llegar hasta la cabeza de sus enemigos. Es obvio que esto despertó la furia y temor de muchos de los líderes terroristas alrededor del mundo, en especial en Hasan Nasrallah que se dirigió a Israel con largos discursos a los que ya estamos acostumbrados. Es verdad, las amenazas de Nasrallah no deben ser ignoradas, como tampoco  que Israel está intensificando su actividad en otra frontera, Siria, atacando con mayor frecuencia puntos estratégicos más letales en dicho país ¿El próximo frente, podría ser con Siria y no con Líbano?

El frente sirio

Desde el comienzo de la guerra las FDI realizaron algunas maniobras en Siria para dificultar la influencia iraní económica, ideológica y militar. Económica, por las suma de dinero siendo Siria un puente para la transacción con Hezbollah; ideológica, por su influencia en la opinión pública de la calle árabe islámica chiita y militar por el armamento que le proporciona a sus aliados en la zona siendo Siria un punto estratégico desde el cual puede también atacar a Israel.

Por esa razón el operativo israelí, el pasado 25 de diciembre, donde fue asesinado Seyed Razi Mousavi, un alto comandante de la Guardia Revolucionaria Iraní en Damasco, se considera como una de las operaciones más poderosas hasta el momento por parte de Israel.   Seyed Razi Mousavi era parte del personal militar de Irán en Siria y el Líbano, considerado una figura central de alto rango quien se ocupaba del fortalecimiento de la influencia iraní en la zona.

Se está hablando de una suma de cinco ataques en total por todo el espacio sirio, desde Damasco en el sur, hasta Alepo en el norte y la zona fronteriza con Irak en Al-Buchmal en el este, cumpliendo con la aniquilación del eje chiita, incluidos agentes de Hezbollah y frustrando objetivos palestinos que operan desde territorio sirio, por ejemplo, el asesinato (el 8 de enero) de Hassan Akasha, responsable de lanzar cohetes de Hamás desde Siria.

De momento solo se lanzaron algunos misiles desde aviones no tripulados, atribuidos a milicias pro iraníes en Siria o Irak pero nada significativo. No hemos visto respuestas por parte del Eje chiita. Ni Líbano ni Siria tienen interés real de llevar a sus países a una guerra, pero tampoco mostrarán una imagen débil, por lo cual seguirán con sus amenazas y ataques, pero sin escalar a mayores. Líbano, por su crisis interna, como comenté al principio y Assad desde Siria, por no poner su gobierno en peligro, e Irán no puede forzarlos. De esta manera los intereses políticos del Medio Oriente juegan a favor de Israel, quien tendrá que aprovechar para seguir sus operaciones específicamente en Siria.