Espadas de hierro, un análisis de la guerra hasta el día de hoy y que nos espera
Por: Gastón Saidman
Diez meses después de su inicio, la guerra “Espadas de Hierro” es considerada una de las más difíciles que Israel jamás haya experimentado. El 7 de octubre de 2023 fue el día en que Israel cambió definitivamente muchas de sus opiniones y especialmente la forma de su ataque. Israel ha experimentado muchos atentados contra sus ciudadanos por parte de la organización terrorista durante más de 20 años, siendo la respuesta israelí operaciones cortas pero sin resultados relevantes ya que Hamás solo se fue fortaleciendo hasta convertirse en lo que es hoy, no es fácil derrotar al enemigo que continúa utilizando a civiles como escudos humanos y todo debido a su loca ideología de acabar con Israel.
El panorama de la guerra no es especialmente claro por la falta de acuerdo y el mundo acusa erróneamente al Estado de Israel de rechazar cualquier propuesta del enemigo para un alto el fuego y la posibilidad de devolver a los rehenes. Este era un concepto en el pasado e Israel se habría rendido, pero la realidad actual es diferente. Parece que el mundo no ve que algunos de los detenidos en las cárceles israelíes son los mismos que decapitaron y quemaron bebés, violaron a madres delante de sus hijos y sus cónyuges, junto con otras atrocidades. Israel puede llegar a un acuerdo y liberar a estos asesinos para devolver con vida a sus ciudadanos, pero no puede permitirse el lujo de pagar el precio para que estos terroristas dupliquen su tamaño en los próximos 20 años, por lo que tiene sentido que el mundo vea las diferencias y tener en cuenta que, si Israel libera a esos asesinos por los secuestrados, debe quedar claro que este será el comienzo de la guerra que se avecina en el futuro, el mundo tendrá que convencer a Israel para que llegue a un acuerdo pero no al fin de la guerra, esta vez no puede parar hasta acabar con Hamás.
En este artículo intentaré explicar cómo afecta la guerra a ambos bandos, sus logros y fracasos para entender cómo puede continuar, cuál sería el mejor acuerdo que Israel podría elegir e intentar responder a la pregunta ¿Quién esta ganando?
Con el ataque del 7 de octubre, Hamás enumeró algunos de sus objetivos como mucho más amplios y ambiciosos que simplemente liberar a los prisioneros terroristas en la prisión de Israel; estamos hablando de atraer el interés internacional a la causa palestina, al margen de las buenas relaciones que empezaban a gestarse entre Israel y otros países de Oriente Medio, lo que creó un ambiente tan positivo y con tanta esperanza que la cuestión palestina quedó de lado. Estaba claro que tarde o temprano habría una tormenta entre Israel y Hamás, pero esta vez Israel tomó una decisión final, a diferencia de 1982 en la primera guerra con el Líbano, que no terminó y Hezbolá creció, o cuando Estados Unidos derrocó por completo a Saddam Hussein, fortaleciendo la imagen de Irán, en fin todo tiene un resultado. Ahora en base a la experiencia debemos saber si Israel da otra oportunidad o no y centrarnos en hasta dónde puede llegar Occidente, por qué con Hamás el terrorismo todavía tiene una ventaja, lo que podría ser muy peligroso para Occidente y no sólo para Israel.
Si observamos la escala de valores según los puntos de vista de Hamás, después del caos que se produjo tras el atentado del 7 de octubre, notaremos que la organización no ve los ataques israelíes como su derrota, al contrario hay que analizar y entender por qué los líderes de Hamás y algunos de sus seguidores todavía ven la guerra como una victoria de la causa palestina. Para entender lo siguiente debemos profundizar en la ideología islámica y su historia, y aunque esto no de todas las respuestas, aún podemos entender mejor algunas cosas.
La invasión de Hamas representa algo más que un simple acto terrorista, según la tradición islámica, es el cumplimiento de la profecía de la destrucción de Israel basada en la famosa Batalla de Badr, un enfrentamiento en la que una pequeña fuerza de creyentes bajo el mando del profeta Mahoma logró derrotar a una gran fuerza de Quraysh y habitantes de La Meca que se oponían a su profecía. Las batallas del 7 de octubre fueron vistas como una victoria divina de los creyentes sobre los enemigos de Alá (dios) pero versión palestina, conociendo la importancia de la tradición en la cultura del Medio Oriente, especialmente en el Islam, es muy fácil para Hamás jugar con la fe de sus seguidores.
El Centro Palestino de Al-Alem publicó una serie de artículos explicando la conexión entre lo divino y lo terrenal, con el fin de convencer a su gente de que el peligro que experimentan en los ataques de Israel es parte de la profesión y vale la pena el esfuerzo, Y aunque sea difícil, los creyentes del mundo islámico así lo ven.
La crisis social que vivió Israel por conflictos políticos internos fue vista como una buena oportunidad para que Hamás llevara a cabo su ataque, poniendo a la sociedad israelí en una situación muy similar a la que vivió en la guerra de Yom Kipur, con la diferencia que aqui secuestraron y masacraron ciudadanos, por lo cual el trauma hoy es más profundo.
Al inicio de la guerra, Hamás consiguió evacuar a gran parte de los ciudadanos israelíes que vivían en la Franja de Gaza, con el apoyo de Hezbolá en el Líbano consiguieron evacuar a otros 200.000 en el norte de Israel, y aunque el número de bajas del ejército israelí es inferior al de su enemigo, todavía se le considera relativamente alto en cuanto a sumar unidades especiales y comandantes destacados que perdieron la vida.
En el marco internacional, la cuestión palestina ha vuelto a ser motivo de interés para varias organizaciones no gubernamentales e instituciones internacionales como las Naciones Unidas y el Consejo de Derechos Humanos quienes han organizado enormes manifestaciones contra Israel y de apoyo a Hamás. Estos ejemplos deben tomarse muy en serio, ya que tendrán un impacto a largo plazo. Como resultado de la actividad del BDS con su boicot económico, las manifestaciones estudiantiles en Europa o Estados Unidos han logrado congelar la ayuda militar de varios países, como España, que se negaron a permitir que atracara allí un barco indio cargado con material militar israelí. También, Los continuos ataques de Irán y sus representantes contra Israel expresan un estado de erosión de la disuasión israelí desde el 7 de octubre. A pesar del éxito de la operación militar en Gaza, Israel no ha restablecido su disuasión regional.
El lado israelí también tiene sus logros, sobre todo si comparamos cómo la rama militar de Hamás y sus capacidades han disminuido, es decir, en términos militares Hamás ya no es considerado una amenaza, tras la invasión terrestre del ejército israelí se pudo aminorar la amplitud de sus cohetes y su fuerza en el campo de batalla eliminando a gran parte de sus combatientes. Israel logró reunir a sus comandantes y reservistas en un período de caos e indecisión gubernamental, para luchar y tomar decisiones juntos desde el momento en que comenzó la guerra, los ciudadanos israelíes que se encontraban en el extranjero regresaron para alistarse en sus unidades. La victoria militar israelí es en parte gracias a esto. Está claro que no sólo se debe observar el comportamiento de los ciudadanos israelíes, en comparación con conflictos anteriores, los ciudadanos árabes que viven con ciudadanía en Israel no se mostraron dispuestos a unirse a la lucha del lado de Hamás como esperaba la organización, de lo contrario, incluso sabiendo que los ciudadanos árabes creen firmemente en la lucha por la liberación de Palestina, esta vez no fue mayoría e incluso hubo quienes se solidarizaron con Israel, sobre todo sabiendo que la masacre del 7 de octubre se cobró la vida de muchos árabes israelíes.
En relación con los secuestrados, es cierto que esto sigue siendo una herida abierta para los israelíes, pero siendo así, hay que aceptar que la mayoría de los ancianos, mujeres y niños han sido devueltos a un precio relativamente bajo .
El momento en que Estados Unidos estuvo del lado de Israel cuando Irán atacó demostró al mundo, pero especialmente a sus enemigos, que el eje entre Israel y Estados Unidos sigue existiendo a pesar de que la administración de Biden ha mostrado cierta distancia en el pasado. Lo mejor fue que los países árabes del Golfo, Jordania e incluso Arabia Saudita participaron a favor de Israel, algo que en el pasado no se habría hecho tan públicamente siendo estos últimos países islámicos. Esto marcó la culminación de otro logro israelí: mantener los Acuerdos de Abraham y el posible acuerdo con Arabia Saudita que aún está sobre la mesa. No se puede subestimar el valor de este importante progreso.
¿Cómo continuamos?
Israel tendrá que volver rápidamente al plan de un acuerdo con Arabia Saudita, ya que en parte el objetivo de Hamás era detener esta cooperación. Israel puede abrir la puerta a una asociación económica y de seguridad y a una alianza regional que detenga a Irán, sus representantes y aliados. La presencia de las I.D.F deberan seguir existiendo en la Franja de Gaza hasta estar seguro de que la fuerza militar de Hamas no podra levantarse de nuevo. La restauracion de Gaza y sus civiles tendra que ser junto con la influencia de Arabia Saudita y Egipto, ya que estos dos desean ser los paises lideres del Medio Oriente, por lo cual en su agenda debe de estar la cuestion palestina le guste a occidente o no.
En relación con Hamás, se debe trabajar para crear una generación con otros ideales en las calles de Gaza, esto se puede hacer a través de la educación en plazo 30 años. Hoy en día, el mundo moderno todavía está en peligro y seguirá estando incluso si la organización terrorista es borrada del mapa. Si no nos tomamos en serio la rehabilitación de Gaza y no nos conformamos con simplemente reconstruir los edificios, tal vez Hamás no existirá, pero su ideología e idea continuarán en la visión de los ciudadanos palestinos.
Excelente analisis !!!