Fomentar las inversiones en la alta tecnología israelí

Por: Gastón Saidman
Fuentes: Knesset

Comité de Finanzas

A la luz de la fuerte caída de las inversiones en el sector de alta tecnología desde mediados de 2022, el Comité de Finanzas se reunió con el ministro de Ciencia, Innovación y Tecnología, Sr. Ofir Akunis (Likud) para discutir el próximo proyecto de ley.

La propuesta se llama “la ley para incentivar la inversión en alta tecnología”, y actualmente se encuentra en proceso de cambios debido a la escasez de inversiones internacionales. Esta ley tiene como objetivo facilitar a los inversionistas interesados en la alta tecnología, dándoles el apoyo necesario para el crecimiento y la prosperidad.

La reunión en el Comité de Finanzas presidido por el Diputado Moshe Gafni (Yahadut Hatorah) se llevó a cabo con el fin de repasar la ley en cuestión y prepararla para su segunda y tercera lectura. La propuesta consiste en establecer beneficios para los inversores en empresas israelíes de alta tecnología, y a las empresas por fusionarse con otras o comprarlas, siempre que estas estén registradas en Israel incluyendo sus operaciones y administración.  

El ministro de Ciencia, Innovación y Tecnología, Ofir Akunis, agregó durante la reunion que la ley ha pasado por diferentes cambios en el ultimo tiempo, pero en el momento en que se decida aclarar sus artículos, no habrá duda de que será apoyada por los diputados de la oposición y la coalición.
El objetivo principal será eliminar barreras y fomentar el establecimiento y crecimiento de empresas israelíes de alta tecnología a través de una renovación de las regulaciones sobre los impuestos. El ministro agregó que solo bajando los impuestos se podrá ver resultados positivos.

En las notas explicativas del proyecto de ley se afirma que “en los últimos años, la industria de alta tecnología israelí mantenía datos de actividad relativamente buenos, tanto a nivel de inversiones como a nivel de salarios, aun con la crisis económica que azotó al país por la propagación del coronavirus. A pesar de los datos alentadores antes mencionados, la competencia entre países por la ubicación de las actividades de las empresas, principalmente en el campo de la tecnología y por la ubicación del registro de sus ingresos, requiere la asignación de recursos para preservar a Israel como un destino atractivo para las inversiones”.

Detallaremos un poco más la ley, dando relevancia a lo siguiente, considerando que el objetivo principal de la idea es incentivar las inversiones, tanto privadas como corporativas, incluso en empresas que se encuentran en su etapa inicial:

Estos inversores suelen ser estratégicos, es decir, tienen experiencia en el campo en el que invierten, por lo que las empresas también se benefician de este aspecto.

El segundo punto sería diferir el pago del impuesto a las ganancias de capital por la venta de una empresa de tecnología a un accionista que utilice parte de las ganancias de la venta para invertir en la empresa.

Lo tercero es que permite una inversión en acciones como gasto a efectos fiscales, para una gran empresa tecnológica que adquiere el control de otra empresa tecnológica, extranjera o nacional. En general, de acuerdo con las leyes fiscales, una inversión en acciones no es inmediatamente deducible, y sólo se refleja para efectos fiscales cuando se enajenen las acciones, en forma de una reducción de la ganancia de capital sobre la que se paga el impuesto.

También se propone otorgar a las instituciones financieras del exterior una exención de impuestos sobre sus ingresos por intereses, tarifas de descuento o diferencias de vinculación. Determinar la exención propuesta puede ayudar a reducir los costos impuestos a las empresas israelíes de tecnología para obtener crédito de instituciones financieras extranjeras que se especializan en otorgarlo a dichas empresas.

Además de estos puntos, se propone establecer que se prorrogará la vigencia del artículo 92a de la Ordenanza del Impuesto sobre la Renta, que otorga un beneficio similar a los beneficios previstos en esta ley, por las inversiones en empresas de investigación y desarrollo que se emitan en la bolsa de valores , y que se establece como disposición transitoria por 5 años.